Los Ángeles CA. – El veterano actor Donald Sutherland, conocido por sus emblemáticos papeles en películas como “MAS*H”, “Klute” y “The Hunger Games”, ha fallecido a los 88 años. Su agente, Missy Davy, informó que Sutherland murió el jueves en Miami tras una larga enfermedad.
“Con gran pesar, les digo que mi padre, Donald Sutherland, ha fallecido”, escribió Kiefer Sutherland, su hijo, en una publicación en Instagram el jueves. “Personalmente me parece uno de los actores más importantes de la historia del cine. Nunca se amilanó ante un papel, bueno, malo o feo”. Kiefer también expresó que su padre “amaba lo que hacía y hacía lo que amaba, y no se puede pedir más que eso. Una vida bien vivida”.
Con una estatura de 1,95 metros y conocido por su intensidad en pantalla, Sutherland ganó un Emmy por su papel de funcionario soviético en la película de HBO “Citizen X” y obtuvo un par de Globos de Oro. Su carrera abarcó más de 50 años y más de 140 créditos cinematográficos, incluidos papeles recientes como el del magnate petrolero J. Paul Getty en “Trust” y en “The Undoing” de HBO.
A lo largo de su carrera, Sutherland demostró una capacidad excepcional para interpretar una amplia gama de papeles. En la década de 1970, protagonizó la nueva versión de la película de terror “Invasion of the Body Snatchers” y fue un memorable profesor fumador de marihuana en la comedia “Animal House”. También actuó junto a Julie Christie en “Don’t Look Now”, una película de 1973 dirigida por Nicolas Roeg, que se hizo famosa por una escena de sexo que tuvo que ser recortada para evitar una calificación X.
Sutherland continuó con una variedad constante de papeles en diferentes géneros, desde un pequeño pero fundamental rol en “JFK” de Oliver Stone, hasta trabajos secundarios en “Ordinary People”, “Buffy, la cazavampiros”, “Backdraft” y “The Italian Job”. También interpretó al legendario amante en “Fellini’s Casanova” y es recordado por muchos jóvenes como el malvado presidente Snow en “The Hunger Games”.
En una conversación de 2020 con Hugh Grant para la revista Interview, Sutherland reveló que siempre estaba tan nervioso al inicio de un rodaje que vomitaba la noche anterior. También mencionó que alteraba sutilmente sus diálogos para adaptarlos mejor a su estilo.
Sutherland y su hijo Kiefer trabajaron juntos en tres películas, comenzando con “Max Dugan Returns” en 1983, seguida de “A Time to Kill” y finalmente en el western de 2016 “Forsaken”. Sobre esta última, Kiefer comentó que fue una experiencia que atesorará por el resto de su vida.
Cuando se le preguntó qué consejo daría a los jóvenes actores, Sutherland dijo a Reuters en 2019: “Intenta ser lo más sincero posible, lee mucho, aprende, disfruta de tu arte, estudia danza, sé un artista de circo, aprende a hacer malabares, pero sobre todo, observa”.
Sutherland recibió un premio honorífico de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas en 2017 y fue honrado con la Orden de Canadá, dejando un legado inolvidable en la industria del cine.
